El color del producto es la forma más rentable de cambiar la imagen de un producto, y tiene una gran influencia en las tendencias y un gran valor emocional. Puede transmitir claramente las estrategias de marca y de producto, al tiempo que prolonga el ciclo de vida del producto.

El factor clave que influye en las tendencias del color es la situación económica. Cuando la economía es fuerte, los colores tienden a ser optimistas y vibrantes, con colores de alta tecnología que ganan atención y una orientación de valor globalizada. Cuando la economía se ralentiza, los colores se orientan hacia la curación y los placeres sencillos.

El color es parte integrante de la calidad, y la coherencia es un requisito fundamental. Ya sea en productos físicos o en procesos de diseño digital, mantener la calidad visual exige controlar la coherencia del color. La precisión del color de un monitor profesional es una parte esencial del control de calidad.

En la colaboración en equipo, la coherencia de la visualización es crucial para una comunicación eficaz del diseño. Los monitores de diseño profesional de BenQ ofrecen un soporte técnico fiable para garantizar una representación precisa del color.

Desde los smartphones hasta los automóviles, la integración de componentes es una tendencia imparable, que conduce a una mayor homogeneización de los productos. El CMF (Color, Material, Acabado) se ha convertido en un diferenciador clave, pero el diseño y la evaluación del CMF son muy subjetivos. El laboratorio CMF proporciona validación científica a lo largo del proceso de diseño y ofrece criterios objetivos para la evaluación del diseño.